Mi primer hogar fue una pequeña casa rentada (casas rentadas, una marca existencial en mi vida) en la tlalpeña calle Coapa, colonia Toriello, entre la vía del tren (así se le decía entonces al tranvía: tren) que iba del pueblo de Tlalpan al centro de la ciudad y La Villa de Guadalupe (del lado oriente de la vivienda) y la vía del mismo tren a su regreso (del lado poniente). Ahora que lo escribo, me doy cuenta de algo: que nací en medio de dos vías: una que iba y otra que regresaba. Supongo que algún significado real o simbólico podría tener eso, pero no tengo la menor idea de cuál sea.
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