miércoles, 12 de agosto de 2009

La RAE se pone laxa


Tan rígida e inflexible que era antes, hasta niveles de ortodoxia extremos y de un mamonerismo y un tradicionalismo insoportables, y en los últimos tiempos la Real Academia Española de la Lengua (la famosa RAE) se ha vuelto tan laxa que se le podría aplicar aquello de "flojita y cooperando". No sé si fue por la llegada de las nuevas tecnologías, con su cauda de terminajos provenientes del inglés, pero de pronto los otrora severos académicos españoles han empezado a aceptar cualquier término sin muchos inconvenientes y han dejado entrar a palabras verdaderamente horrendas. Ahí están los casos de los verbos posicionar y promocionar, verdaderos adefesios lingüísticos que hoy están dentro del diccionario de la RAE sólo porque se les usa extensiva (y asquerosamente) en el habla común, sobre todo en los terrenos de la publicidad y de algunas disciplinas como la sociología. Si el único criterio para aceptarlas es su utilización generalizada, allá la Madre Academia y sus decisiones. En lo personal, me niego a emplear ambos verbos y mis criterios básicos son dos: uno, porque son feísimos (criterio estético); dos, porque hay una gran cantidad de verbos hermosos y llenos de riqueza etimológica e idiomática que podemos seguir usando (criterio opcional). En el caso de posicionar (y su aún más desagradable participio: posicionado), mucho mejor me parece seguir usando colocar, situar, instalar, distribuir, acomodar, etcétera. Para el mil veces pavoroso promocionar, la alternativa directa es el bello verbo promover, hoy casi olvidado por la ignorancia de muchos hablantes, aunque también podemos utilizar otros como impulsar o fomentar.
Nuestra lengua recibe a diario agresiones que la socavan y la empobrecen, todo en aras de una supuesta apertura y de una adecuación a los tiempos que corren. No digo que nos cerremos a todo (por ejemplo, me parece bien que ya se acepte la palabra evento como sinónimo de suceso o acontecimiento), pero si algo debemos preservar es la belleza de un idioma que llegó a nuestras tierras hace más de quinientos años y que aquí se enriqueció gracias a las lenguas indígenas americanas. El español es uno de los idiomas más ricos en vocabulario de cuantos existen en el mundo. Cuidémoslo con inteligencia... y con buen gusto.

(Imagen tomada de la página Hazme el chingado favor.com)

5 comentarios:

Charro Negro dijo...

Lo malo ya que, ni los maestros de primaria leen y muy pocos son estrictos con el correcto uso del Español.
Por lo pronto reconozco mis grandes fallas gramaticales y ortografica, sin embargo, se que algun dia podre escribir y hablar correctamente.

Antonio Martínez dijo...

Tiene razón. y luego dicen por ahí que es el vulgo el que deforma el idioma.

Spinotti dijo...

Dentro de lo que cabe, siempre trato de escribir de la mejor manera posible. Se que se me barreran mil cosas por el camino, pero siempre lo intento. Y bueno, ciertamente a veces trato de corregir a algunos amigos en su expresión (cosa que a veces no me gusta, porque lo tachan a uno de mamón).
Don Hugo, nunca le ha entrado el gusanito por ser profesor de gramática? Creo que poca gente conozco que trate de llevar un uso correcto del idioma.

arielo dijo...

Me pasa con accesar (siempre me ha parecido feo)en vez de acceder que es lo correcto.

Raúl H. Pérez dijo...

No creo que se trate de apertura, don Hugo, mas bien es la gente quien hace el idioma, no la RAE, ésta sólo "coloca" en el diccionario las palabras utilizadas.

El lenguaje no es estático, aunque por supuesto hay aberraciones (no creo que lo sean las que usted señala).

Saludos desde Mérida.