sábado, 27 de marzo de 2010

¿Debe renunciar el presidente?*


Desde hace algunas semanas, tal vez meses, corre en las redes sociales de internet una propuesta para que el presidente Felipe Calderón renuncie a su cargo. Se argumentan diversas razones, sin que pueda evitarse el tufo a pejismo de quienes lanzan dicha proposición. No obstante, es un asunto a considerar: ¿debe renunciar el presidente?
Desde que inició su mandato, Calderón olvidó su principal propuesta de campaña (ser “el presidente del empleo”) y aconsejado quién sabe por quiénes, al parecer quiso legitimar su elección mediante el expediente de declarar una inesperada guerra contra los cárteles de la droga. Hubo quienes desde el principio opinamos en forma pública que era un desatino, pero el gobierno se lanzó militarmente contra el súbito enemigo y después de más de tres años de violencia infernal, los resultados no son los mejores y abundan los analistas que dan por perdida a esta guerra.
Sigo pensando que la mejor manera de legitimarse, luego de la cerrada votación que en julio de 2006 puso en duda su triunfo en las elecciones, habría sido que Calderón emprendiera una guerra contra el desempleo o por la educación y que todos los recursos gastados en armas, balas y movilización de las fuerzas castrenses hubiesen sido invertidos en la construcción de escuelas, hospitales, carreteras. Para mí fue un error. Sin embargo, no comparto la idea de que el presidente renuncie, ya que en estos momentos, dado lo inédita que sería semejante situación, se crearía un vacío de poder que no haría sino empeorar al ya de por sí descompuesto ambiente político.
Dado que no se ve por dónde pueda seguir funcionando la estrategia combativa contra el crimen organizado, tal vez un primer paso sería reestructurar a todo el gabinete de seguridad y llamar a gente con nuevas ideas, así se trate de integrantes de fuerzas políticas ajenas al PAN. Urgen soluciones imaginativas que alejen al país del fatídico circulo vicioso en el que se encuentra atrapado. A pesar de todo, todavía estamos a tiempo de evitar la hecatombe.

*Publicado hoy en mi columna "Cámara húngara" de Milenio Diario.

1 comentario:

judith dijo...

¿Renunciar? Tampoco lo creo conveniente. ¿Te imaginas el caos? Porque entonces entraría la guerra por el poder entre los grupos políticos. Si bién es cierto que Calderón no ha podido con el paquete lo más recomendable es que aguante hasta el final, por el bién de todos. Que siga haciendo acto de presencia el ejército ya después de las matazones, porque para mi sería más efectivo que se lograran evitar éstas y no llegar nadamás para la foto, para que pensemos que qué bueno es nuestro ejércto, que velan por nosotros. No, no seria lo más viable. Sin embargo, como bién dices aún queda algo de tiempo para enmendar su sin fín de errores, eso, si es que le queda algo de verguenza. Nosotros como el chinito, nadamás milando.
Necesitamos despertar, hacernos oir, que se den cuenta que nuestro voto los pone en el poder, necesitamos hacer cambios en la Constitución, que si no dan resultados en un año, ¡¡Que se vayan!! Muchos dirán es muy poco tiempo, pero..para robar no se necesita mucho y entre más tiempo están en el poder se despachan con la cuchara grande. En fin, ya queda poco de este sexenio, ahora rogar para que el PRI no regrese (¿O si?) dicen los que saben que eso es el futuro, que es lo que México necesita. Me recuerda a la época de Santa Ana no sé por qué....