lunes, 12 de octubre de 2009

"Del infierno del cual seguramente regresará"


Con el largo título La Mosca en la Pared, revista musical de culto en México, deja de existir, en marzo del año pasado apareció este texto en el (¿extinto?) blog Insonaciones. Desconozco quién lo escribió, pero me gustaría reproducirlo ahora que La Mosca en la Red se acerca a su primer mes de vida. Desde aquí, un agradecimiento al autor.





Acabo de enterarme, por el blog del buen Hugo García Michel, que su bebé, la revista de sus amores, La Mosca en la Pared, ha pasado a “mejor vida”, si es que a la no vida se le puede llamar mejor vida.
Para quienes vivimos en México, La Mosca fue la primera revista seria sobre música que muchos tuvimos en las manos, una revista que no sólo hablaba sobre música, sino también de cine, arte, literatura y cultura en general. Mucho antes del boom de internet, de Napster, los torrents, el iTunes y demás, La Mosca era casi La Biblia para todos aquellos que amamos la buena música y nos resistíamos a escuchar los bodrios que la radio y MTV nos querían vender. Gracias a La Mosca conocí a Emerson, Lake & Palmer, Led Zeppelin, Joe Satriani, Charlie Parker, Janis Joplin, Thelonius Monk, The Clash, Taxi, Boston y una innumerable lista de grandes bandas y músicos.
Aparte de la incuestionable calidad de su contenido y su compromiso con una crítica sin miramientos, cuando todos apostaban a los formatos convencionales La Mosca fue innovadora desde su alumbramiento, al venir en un formato único que la hacía diferenciarse de entre todas las revistas del mercado, musicales o no. El arte de la revista fue siempre impecable y tuvo épocas en que rayó en el arte-objeto; sus portadas eran verdaderas obras de arte y le propuesta gráfica de sus contenidos siempre fue fresca, propositiva y en constante evolución.
Sin embargo, a todos les llega su hora e, irónicamente, la que fuese pionera tuvo que competir con nuevas revistas que, siguiendo su ejemplo, tienen niveles de calidad que antes sólo La Mosca poseía. Ejemplos de ello son Marvin, Complot, Sonika y, más recientemente, Warp. Si a esto le sumamos las revistas que llegan del extranjero, algunas de ellas muy interesantes, las revistas digitales y sitios web especializados en música de todo tipo, el escenario ya no es el de algunos años atrás, en que la revista era un faro a seguir en un mar desierto de contenidos de calidad.
La Mosca ha sucumbido hoy ante el matamoscas de los números, los cuales dicen que ya no es rentable para una editorial que le debe mucho de su éxito y posicionamiento en el mercado, una editorial que hoy dice que los contenidos de la edición 126 ya no pasarán a los talleres de diseño y que el ejemplar de este mes, con el que la revista cumple catorce años, será el último de su muy exitosa y memorable historia. Así que guardemos todos un minuto de silencio, porque la madre moscosa se lo merece. Descanse en paz y ojalá que en el infierno del que seguramente regresará un día de estos, se la pase a toda madre con Morrison, Lennon, Hendrix y todos aquellos que seguramente la recibirán con los brazos abiertos y le darán el reconocimiento que ahora le niegan aquellos que, gracias a ella, tuvieron algo que llevar a su mesa y a sus oídos.

4 comentarios:

Antonio Martínez dijo...

Yo me uno a la congratulación. Señor Hugo: Usted, con "La Mosca" me inspiró a crear mis blogs. A tener hambre de escribir. a escuchjar mejor música. Gracias por todo ello.

Miriam Canales dijo...

¿Qué descanse en paz y en el infierno? ¡Uff! ¿se puede tanta belleza?

Decireves dijo...

ese blog de insonaciones esta muy bueno, mucha musica de la llamada no comercial...

saludos!

Anónimo dijo...

Los tiempos cambian y sin embargo se encontró la manera de seguir adelante, eso mi querido Don H es de felicitarse, no cualquiera puede. Saludos.