sábado, 27 de febrero de 2010

La Riviera Maya y el nuevo club de Toby*


Los iberoamericanos (que no latinoamericanos) seguimos instalados en la época de la Guerra Fría. Los años setenta del siglo pasado aún pesan sobre nuestra idiosincrasia y el antiimperialismo rampante de aquella década es lápida enmohecida que nos negamos a quitar de nuestras cóncavas espaldas. Mientras la mentalidad del resto del mundo gira en otras dimensiones, por estos lares continuamos sumidos en el surrealismo mágico de los patriarcas que desde su otoño ideologico nos gobiernan o nos desgobiernan.
El ejemplo más claro de esto lo tenemos en la reciente reunión de presidentes de Iberoamérica, celebrada en la Riviera Maya. Ahí se dieron cita preclaros miembros del nuevo club de Toby (por aquello de “no se admiten gringos o canadienses”), tipos tan cultos y preclaros como Hugo Chávez, Raúl Castro, Daniel Ortega, Cristina Kirchner y ese nuevo ídolo de los progres coyoacaneros que es Evo Morales.
Lo que resulta extraño y contradictorio es que el presidente mexicano se haya empeñado en ser admitido en este club de la gauche demodée y hasta haya propuesto convertirlo en una nueva organización internacional. Al más puro estilo priista y tercermundista de Luis Echeverría Álvarez, el panista Felipe Calderón mostró un afán iberoamericanoide digno de mejores causas y de manera tácita enseñó que lo-suyo-lo-suyo no es acercarse al horripilante imperialismo yanqui (aunque tengamos tres mil kilómetros de frontera con el mismo) sino a la nación bolivariana que hoy maneja a sus anchas el mencionado gorilita Hugo Chávez.
Claro, por ahí andaban también Lula da Silva, Álvaro Uribe y otros precisos, pero la impresión que queda es que Calderón quiso quedar bien sobre todo con el chavismo. Vaya bochorno.
Líderes muy diferentes entre sí los que se reunieron en Playa del Carmen, aunque bien vistas las cosas, al final algunos de ellos tienen algo en común: haber sido personajes de Los Simpson o de South Park.

*Publicado hoy en mi colunna "Cámara húngara" de Milenio Diario.

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