Recuerdo que una vez mi mamá me comentó: “El
Cuate
Serrano dice que su secreto para conservar la salud es tomar cada noche una
cucharadita de bicarbonato de sodio”. El
Cuate Serrano era un amigo de mis
papás, un señor muy simpático y afable, compañero de copas de mi padre, de
quien ya escribiré en mi
blog Pretérito imperfecto. La cosa es que aquel
consejo se me quedó grabado en el inconsciente durante décadas, sin que yo lo
pusiera en práctica. Hasta que hace algunos años empecé a sufrir agruras, sobre
todo en las noches, con ese horrendo reflujo que en ocasiones llega a quemar la
garganta. Entonces recordé las palabras del
Cuate Serrano y empecé a tomar una
cucharadita de bicarbonato antes de acostarme. Santo remedio. Desde entonces,
jamás he vuelto a padecer agruras o reflujo. Yo les paso al costo este remedio
que a mí me ha resultado excelente durante largo tiempo (recuerden que uno de
los medicamentos clásicos para el malestar estomacal, el Alka Seltzer, está
hecho a base de bicarbonato de sodio) y les paso también al costo que según algunos estudios médicos, este polvito puede matar algunas células malignas, por lo cual podría constituir un excelente medio para prevenir el cáncer. No lo sé, sólo lo leí, pero no lo dudaría.
… y ya que
mencionaba el apellido Serrano, en la divertidísima serie española de
televisión Los Serrano que hasta hace un par de años pasaba por Cadena 3, hubo
un capítulo en el cual dos de los personajes viajaban a los Estados Unidos y al
llegar al aeropuerto de Nueva York y serles revisado su equipaje, les
encontraban una bolsita con un polvo blanco que hacía que los detuvieran, al
pensar los guardias que se trataba de cocaína. Los muy ingenuos baturros se habían
llevado una dosis de bicarbonato para curarse el estómago.
Así, pues,
dos consejos: 1. No cenen mucho y tomen una cucharadita de bicarbonato de sodio
antes de irse a la cama. 2. Cuando viajen al extranjero, mejor lleven Alka
Seltzer… o cómprenlo allá.
1 comentario:
Ojalá sea verdad eso. Una cucharada de bicarbonato antes de cada cigarro que me echo, ¿funcionará? Esperemos, je je. Saludos, Hugo.
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