miércoles, 11 de febrero de 2009

La sabiduría de Normita


En 1994, cuando hacíamos los primeros números de La Mosca en la Pared, allá en las primigenias oficinas de Avenida Universidad, a la altura del metro Viveros, trabajaba con nosotros una secretaria de nombre Norma, a quien cariñosamente llamábamos Normita. Nunca olvidaré el día en que me vio preocupado por algún asunto que ya no recuerdo y lo que me dijo entonces: "Si tu problema tiene solución, ¿para qué te preocupas?; y si no tiene solución, ¿para qué te preocupas?". He tratado de llevar a la práctica dicho consejo y me ha funcionado casi siempre, aunque... a veces no es tan fácil dejar de preocuparse. Chin.

4 comentarios:

Paco Payán dijo...

Aún recuerdo cuando compraba los primeros números de la mosca, práctica que mantuve por años.A veces andaba preocupado por diferentes cuestiones,leía la revis,me instruía,liberaba los problemas,terminaba de hojear.Comprar cd's y la preocupación se escondía por momentos.

Resueltos o no,a veces es imposible dejar de preocuparse.Qué días aquellos con la mosquita recien comprada en el centro de la ciudad,los pedos desaparecian pues llevaba un tesoro entre las manos

Saludos

Anónimo dijo...

Te voy a pedir un favor: encuentra a Normita y agradecele que te dio ese consejo; yo te agradezco por darlo a conocer. En estos momentos tengo infinidad de problemas y el consejo empieza a hacerme efecto.

Sabia, Norma.

Néstor Salgado dijo...

Yo me uno al Buen piper...

En mi caso, acá en Toluca, me sucedía una antítesis de la menstruación femenina, porque mientras ellas veían con angustia que se venía el 28, yo no podía dejar de emocionarme (por decirle de alguna manera) cuando veía que el día 4 se veía venir (asi fue mucho tiempo, aunque tambien llego a ser el 10, el 14 y el 22 de cada mes)

Nada como abrir las páginas del pásquin aquel y pasar horas de lectura amena y entretenida. Desde el Ojo de Mosca (que despues se supo que era el Dire), el Correo de Mama Mosca (que nunca supe quien era), hasta lo que publicaban Fedro, Eusebio y demás colaboradores...

Un festín aquel...

Cuando supe que ya no iba a aparecer, caí en una depresión de aquellas (ni cuando los Pumas estuvieron cerca de descender ni cuando supe que en verdad Gloria Trevi conduciría un programa en la misma televisora que en su momento la ataco inmisericordemente)

En fin, una experiencia mas de las que dejó aquella revista... Saludos!!!

Anónimo dijo...

Eso, me parece, un poquito antes que Norma lo dijo Confucio.