martes, 4 de septiembre de 2012

Cantar en inglés (y II)


Descartes a Kant.
Afirmaba en mi anterior colaboración mi desacuerdo con que los grupos mexicanos de rock canten en inglés, pero separaba esto del hecho de que la música de algunos de quienes así lo hacen posee buena calidad. Por ello mencionaba cuatro ejemplos, de los cuales sobre uno (Le Butcherettes) ya hablé hace ocho días. Toca el turno a los otros tres.
  1. Descartes a Kant es un sexteto surgido en Guadalajara hace más de una década que propone una explosiva y efectiva mezcla de géneros que abarcan desde el noise core hasta el electroclash con aderezos de punk, surf, pop, hip-hop y música de cabaret, entre otros. Sus canciones son verdaderos collages musicales muy bien ejecutados e interpretados. Con dos discos hasta el momento –Paper Dolls (2007) y el flamante Il Visore Lunatique (2012)– ofrece una propuesta muy interesante a la que, debo admitirlo, no me imagino cantada en español.
  2. Red Burning Mustangs nació en Pachuca, Hidalgo, en 2006, y se estableció recientemente en el Distrito Federal. La suya es una música muy apegada a los cánones del rock más puro y directo, con influencias del blues, el garage y la psicodelia. Con dos EP en su haber –Firebird (2008) y On the Run (2010) –, por suerte, no suena a eso que algunos llaman rock urbano y hay en sus composiciones un buen gusto que resulta difícil de encontrar en la mayoría de las agrupaciones nacionales.
  3. Conformado por los muy jóvenes (apenas diecisiete años) José Solé y Santiago Gómez, el dueto defeño Little Ethiopia sorprende por la calidad de su sonido post punk que recuerda a grupos como Foals, Surfer Blood, The Drums, The Antlers o The xx, con esa música lo-fi un tanto austera, intimista, de percusiones programadas, instrumentaciones digitales, armonías vocales y cierto dejo melancólico muy apegado a la melodía. Indie electrónico suele llamársele también. Con poco más de un año de existencia, el dúo logró presentarse en el festival Corona Capital 2011 y grabó ya su primer EP. Harían bien en explorar las posibilidades de cantar en español.
  Cantar en inglés o no cantar en inglés, he ahí el dilema. Que cada grupo o solista lo resuelva.

(Publicado hoy en mi columna "Gajes del orificio" en la sección ¡Hey! de Milenio Diario.