sábado, 6 de diciembre de 2008

Bejarano y la vida nocturna*


Ahora que René Bejarano está de regreso (se fue el Noroñas pero llegó el Señor de las Ligas) y viene con todo (su capacidad de acarreo de masas sólo es comparable con la que lograba el PRI en sus días de gloria, esos que muchos aseguran no tardan en volver), la clase política en general y la de izquierda (cualquier cosa que eso signifique hoy día) en particular parecen no saber cómo reaccionar ante dicho retorno.
¿A quién le conviene –además de al propio Bejarano y a su esposa Dolores Padierna, la María Félix de la lumpenizquierda- que este personaje de tan dudosa prosapia vuelva a la luz pública y lo haga en el marco de una demostración de fuerza, con esos miles de acarreados como elemento de presión? ¿Le conviene a su jefe AMLO (si es que todavía es su jefe)? Yo no estaría muy seguro, porque con su mitin del domingo 30 de noviembre pasado, Renecito le dijo indirectamente a Don Peje que él tiene mucha más capacidad de convocatoria que el tabasqueño con sus Adelitas.
En cuanto a Marcelo Ebrard, ¿de qué manera le afectará la reaparición estelar de ese hombrecito de lentes y con aspecto de Woody Allen? Por lo pronto, el jefe de gobierno capitalino no parece muy preocupado y se dedica a hornear galletitas en la tele o a aceptar leyes de la Asamblea de Representantes para limitar la vida nocturna y seguir tratando a los ciudadanos del DF como menores de edad necesitados de protección.
¿Cerrar los antros a las tres de la mañana es la solución para evitar accidentes de tránsito? Puede que sí, puede que no. Lo que resulta cierto, en cambio, es que con ello se afectará a muchas personas (empresarios, meseros, cocineros, barmen, diyéis, etcétera) cuyos empleos dependen de sus actividades nocturnas, mismas que ahora serán recortadas arbitrariamente en pro de una medida que conlleva una fuerte carga de hipócrita moralina (tal vez lo que suceda ahora es que los noctámbulos, en lugar de chocar a las cinco de la madrugada, lo hagan a las dos).
Así estamos los defeños, a expensas de lo que las autoridades piensan que es lo mejor para nosotros. ¿Ahora quién podrá defendernos? ¿René Bejarano? No, pos sí.

*Publicado hoy en mi columna "Cámara húngara" de Milenio Diario.

2 comentarios:

Tsunami dijo...

maestro, yo que soy un defeño de corazón (aunque ahora vivo en el Establo de México, pero planeo regresar algún día), me duele hondo ver como un descerebrado maltrata a mi ciudad adorada... es fea, insegura, maloliente... si, de acuerdo, pero ahora también se ha convertido en un lugar donde uno "tiene miedo de soltarse un pedo" diría la finísima expresión... no necesito enumerar las imbecilidades cometidas desde el anterior sexenio porque de seguro las conoces perfetamente (e incluso debes conocer algunas que a mi me pasaron por alto)... por Dios, llegará a acabar el "reinado" del PRD en el DF algun día???? es que, aaaay maestro, la gente como es pendeja, me cae...

Anónimo dijo...

Hugo (disculpe que le hable de ud, pero creo que he llegado a permitirme esa confianza por leerle por más de una decasa) esto no tendra mucha relación con su escrito, pero se que le gustará: http://www.popthing.com/pop_thing/noticias/kinks_village_green_cumple_anos.php#more
un saludo, esperamos su nuevo proyecto