viernes, 12 de mayo de 2017

Para dártelas de entendido en rock (11)

Tony Iommi, de Black Sabbath, perdió parte de dos de los dedos de su mano izquierda en un accidente de trabajo y pareció el final de su carrera como guitarrista. Sin embargo, se las arregló para seguir tocando mediante unas prótesis de plático que alargaron esos dos dedos, a la vez que afinó su guitarra tres semitonos más abajo, a fin de aflojar las cuerdas y poder tocarlas con más facilidad. La primera canción que compuso para su nuevo "estilo" de tocar fue la fantástica "Iron Man".   

1 comentario:

Anónimo dijo...

Solo que en la imagen el personaje tiene la herida en su mano derecha