domingo, 29 de octubre de 2017

Los 50 años del Señor Fantasía

Traffic fue formado en 1967 por Steve Windwood, poco después de su salida del Spencer Davis Group, al cual había ingresado en 1963, cuando apenas tenía quince años de edad. Verdadero niño prodigio, este multiinstrumentista contribuyó con dicha agrupación de rhythm’n’blues no sólo con su característica y soberbia voz y su extraordinaria manera de tocar la guitarra y el órgano Hammond, sino con un tema clásico de la historia del rock: “Gimme Some Lovin’” (1966).
  Quizá porque el grupo le empezaba a quedar chico o porque quería experimentar con nuevas ideas, en 1967 Windwood se reunió con Dave Mason (guitarra, cítara, instrumentos hindúes) y Jim Capaldi (batería y percusiones) –ambos provenientes del grupo de jazz Deep Feeling–, así como con el flautista y saxofonista Chris Wood. Apoyados por el productor Jimmy Miller y bajo el nombre de Traffic, grabaron en Londres un disco EP con dos temas: “Paper Sun" y “Giving to You”. El primero logró un gran éxito de popularidad y situó a Traffic en el panorama del rock británico de la época. Sin embargo, en lugar de engolosinarse, el cuarteto decidió aislarse de todo y los músicos se retiraron a una mansión campestre en Berkshire Downs, lejos del bullicio del swinging London, a fin de escribir canciones y buscar un sonido nuevo y diferente. El resultado fue el álbum Mr. Fantasy.
  El estilo de Mr. Fantasy (Island Records, 1967) podría definirse como psicodélico–bucólico y fue Chris Wood quien más influyó en la creación de dicho estilo. “En Berkshire Downs, llevábamos una vida totalmente campestre”, cuenta Steve Windwood. “Chris abrió nuestras mentes a una serie de ideas diferentes. Por él conocimos la música clásica china, así como oscuras baladas del folclor inglés. También infundió en los demás un gran interés por cosas como la geología, la topografía y la observación de las aves. Todo ello nos abrió un mundo nuevo y quisimos incluirlo en nuestras composiciones”.
  Mr. Fantasy fue tomando forma poco a poco, gracias a los talentos de Windwood y Mason, las dos fuerzas creativas –opuestas y complementarias– de Traffic. Windwood solía componer junto con Wood y Capaldi, mientras que Mason prefería hacerlo solo y únicamente mostraba las canciones a sus compañeros hasta que estaban por completo terminadas.
  Traffic entró en los Olympic Studios en el verano de 1967 y la grabación del álbum duró cerca de tres meses. Esta tardanza se debió sobre todo a los complicados arreglos de las canciones, llenos de texturas, colores y detalles instrumentales de enorme y sutil riqueza. Se trataba de un repertorio ecléctico y exótico que combinaba el rock con el jazz, el folk y la psicodelia. El productor Jimmy Miller tuvo mucho que ver en la cohesión y conjunción de esa música absolutamente novedosa, a pesar de que el disco fue grabado el mismo año del Sgt. Pepper's Lonely Hearts Club Band de los Beatles.
  Mr. Fantasy comienza con la deliciosa “Heaven in Your Mind”, en la cual las voces de Windwood, Mason y Capaldi logran una expresión coral llena de armonía. “Berkshire Poppies”, por su parte, es una composición juguetona y llena de giros y cambios rítmicos. “House for Everyone” es una de las tres piezas de Mason incluidas en el disco. Su célebre comienzo, como una cajita de música a la que se da cuerda, y su letra llena de fantasía, así como el uso caprichoso de las cuerdas mostraron la capacidad de Dave como compositor y arreglista. Le sigue la bellísima “No Face, No Name and No Number”, con un Windwood que alcanza una tesitura vocal conmovedora.
  “Dear Mr. Fantasy” es ya un tema clásico. Durante sus casi seis minutos, la pieza va alcanzando un crescendo que alcanza su clímax en el intenso solo de guitarra de Windwood a manera de espléndido jam session.
  El lado B del LP original comienza con “Dealer”, una composición de Jim Capaldi, quien hace alarde en la variedad de las percusiones. Se trata de una canción oscura, extraña, con estructuras armónicas que recuerdan lejanamente al flamenco español. “Utterly Simple”, de Mason, es una afortunada incursión en la música de La India, con cítaras y tablas que de inmediato hacen pensar en George Harrison y Ravi Shankar.
  El álbum concluye con tres composiciones espléndidas: la magnífica, sofisticada y muy windwoodiana “Coloured Rain”, la masoniana “Hope I Never Find Me There” y la instrumental y jazzera “Giving to you”, en la que Chris Wood y Steve Windwood lucen con sus respectivos solos.
  Felices 50, Señor Fantasía.

(Texto que escribí para la sección "El ángel exterminador" de Milenio Diario y que se publicó el pasado día 19).

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